Pongámonos en situación: Tienes una cena con amigos a la que te has comprometido a llevar el postre, y por fin vas a poder demostrar que han servido de algo todas esas horas entre masas, hornos y tutoriales de Youtube para aprender a hacer cupcakes.
Llega el gran día, y te pasas toda la
mañana y parte de la tarde haciendo las mini magdalenas de moda plagadas de
elementos decorativos . Será una cena de 10 personas, y como las cupcakes son
pequeñas y sabes que van a triunfar decides hacer tres por persona, así que…
¡Marchando 30!.
Una vez que están todas hechas y que has
compartido tu obra de arte en Facebook, decides ponerte en marcha y salir hacia
la cena, pero entonces te das cuenta de que tienes un gran problema de
logística… ¿Cómo hago para llevarlas hasta allí sin que se estropeen?
Este tipo de producto es
extremadamente delicado y puede perder su valor con facilidad, por lo que
requiere de un tratamiento especial. Para analizar sus características y sus
necesidades específicas a la hora de planificar su transporte y logística, es
necesario ampliar la definición tradicional, en la que sólo se habla de las
características propias de la carga, para analizar todos aquellos agentes
externos que pueden afectarla durante su transporte o distribución.
En general, los factores que más pueden
influir aumentando el riesgo de exposición de las cargas son: embalaje
utilizado, manipulaciónn, ruta/conexiones, tiempo de transporte, contenido,
condiciones de seguridad o el tipo de transporte, entre otros…
Frente a esta problemática, los
responsables de la logística de este tipo de productos cuentan con herramientas
que les permiten minimizar la exposición de las cargas delicadas a estos
riesgos. Pero la mayoría de las personas normales no dispone de estos recursos
por lo que tiene que apañárselas como pueden.
Al igual que la red está plagada de
tutoriales y blogs que te enseñan a hacer cupcakes, también los hay (menos,
pero los hay) que te enseñan métodos caseros de logística de transporte para
este tipo de pastelitos.
Como dice el refrán, el que no corre, vuela, y varias empresas relacionadas con el mundo de la confitería de diseño, se han puesto manos a la obra y nos ofrecen soluciones prácticas como las siguientes:
Esto demuestra que los problemas de logística no llegan siempre con el transporte de grandes automóviles o de delicados productos informáticos, y es que un simple pastelito puede darte muchos dolores de cabeza...
- Maria Angeles Chaves Lorenzo
Gracias Marian por ilustrarnos de tal forma que nos demos cuenta que la logística no es un problema puramente empresarial, sino también cotidiano!
ResponderEliminarDe hecho, hasta ahora no había caído en que prácticamente cada día tengo un problema logístico: La pérdida de la cadena de frío del tupper y el yogur que me llevo para comer en CECO ;)
Excelente artículo. Información precisa y clara.
ResponderEliminarhttp://www.pits.com.pe/